Hace unos meses, en
mi búsqueda incansable por encontrar lugares donde promocionar mi
trabajo para ganarme la vida, me topé con un peculiar grupo de
amantes del Séptimo Arte. Su nombre es Cinema Paradictos y puedes
formar parte de este nutrido equipo en su página de Facebook.
Este grupo surgió
como una reacción de “unos cuantos loquitos del cine”, como
ellos mismos se definen, que estaban cansados de faltas de respeto en
otros foros y decidieron crear el suyo propio. Y lo cierto es que
siempre me alegraré de haber topado con esta tropa.
No esperes estar al
día de todas las novedades del sector, recibir noticias actualizadas
o enterarte de los entresijos y cotilleos de los actores más
cotizados. O tal vez sí. Pero no obstante, el objetivo es hablar,
discutir, comparar, charlar, comentar, hablar... vamos, lo que viene
a ser un pequeño foro de debate entre gente que que ama este
maravilloso arte que es el cine para disfrutar de él.
Lo que más me gusta
de Cinema Paradictos es que igual puedes encontrar a amantes de las
películas de Marvel como de la más refinada Nouvelle Vague. Todo
tipo de films tienen cabida en este grupo, y no es fácil
encontrar el equilibrio sin que lleguen las consabidas riñas, faltas
de respeto y estupideces varias que tan odiosas pueden llegar a ser.
Hace unos meses, yo
me comprometí a hacer una reseña sobre este equipo de gente que ama el cine y lo respeta en toda su magnitud. Por suerte, pero también
por desgracia, el exceso de trabajo había hecho imposible hasta hoy
el que yo cumpliera mi palabra. Pero lo prometido es deuda, y aquí
dejo mi breve pero intenso homenaje a este rinconcito cinéfilo que
me ha aceptado tal como soy, Cinema Paradictos.
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